Desde la mirada de Kant la moral se concibe como un imperativo categórico en donde las prescripciones que nos indican como nos debemos comportar no son tomadas de un lugar ajeno a la razón sino de la misma razón, siendo esta una de las dimensiones esenciales del hombre que le permite actuar con autonomía de la voluntad de acuerdo a la Ley universal. Bajo este postulado en caso de intolerancia moral, se corre el riesgo de que esta se convierta en algunas ocasiones en una agresión a la sociedad, como ocurre con la comunidad LGTBI frente a derechos que la justicia les está reconociendo luego de años de discriminación
La historia registra personajes cuya condición sexual diferente no le ha restado importancia a los aportes que han realizado en todas las ramas del conocimiento y la actividad humana universal, que han contribuido con su obra al crecimiento científico y cultural de la humanidad a punto de inmortalizarse. La lista de personajes en cuyas biografías se declara su homosexualidad es muy grande, en ella encontramos a: Sócrates, Platón, Julio Cesar, Alejandro Magno, Leonardo da Vinci, Nicolás Maquiavelo, Michel Foucault, Alexander Von Humboldt, Sir Francis Bacon, Isaac Newton, William Shakespeare, Oscar Wilde, etc… Es interminable la lista de homosexuales que han nutrido de gloria la humanidad.
Frente a este contexto histórico y teniendo en cuenta que en Colombia esta gran minoría ha dado un paso importante en el reconocimiento y respeto por sus derechos amparados en los principios de igualdad y autonomía que han permitido una transformación gradual del pensamiento social, aterra la doble moral de una sociedad mojigata, moralista e incluso ignorante como la nuestra, que ha puesto a un grupo de colombianos en un closet oscuro en donde pretenden mantener oculta ante la sociedad su verdadera condición sexual, Por tanto resulta admirable que ello no ha sido impedimento, y no tiene por qué serlo, para llegar a ocupar altos cargos en el Estado.
Nadie pone en duda el papel transformador del Estado y la sociedad que se produjo con la Constituyente de 1.991; el padre de esta reforma fue Cesar Gaviria Trujillo a quien se identifica en el pensamiento colectivo como un baluarte de poder de gran ascendencia en estas minorías. De igual forma el Fiscal General (e) Jorge Perdomo, quien se ve expuesto a la caricatura pública en los trinos de Ernesto Yamhure como una persona de condición sexual diversa, es sin lugar a dudas uno de los miembros más queridos y respetados por esa Comunidad que hoy está en pleno ejercicio del poder, en ella encontramos a: Gina Parody y Cecilia Álvarez, ministras del gabinete del gobierno Santos, Claudia López y Angélica Lozano, parlamentarias ejemplares de la Republica, denotando la proyección de Claudia López para ser la primera presidente de Colombia de la comunidad LGTB y dura competidora del exalcalde Gustavo Petro en esa ambición política, Felipe Zuleta Lleras, Gustavo Álvarez Gardeazabal, Fernando Vallejo, Virgilio Barco Isakson, David Manzur, Rubén Afanador (cambió su nombre a Ruven Afanador) y así podíamos mencionar muchos nombres en la justicia, en los tribunales y Cortes, en el deporte, en la academia, en la ciencia, en la política y farándula en donde la lista de homosexuales que han declarado abiertamente su condición sexual diferente es bastante amplia. Ser gay no es solo una preferencia sexual , es un universo integral para ser mejores seres humanos y buscar el camino de la felicidad aun contra su propia naturaleza y eso es justamente lo que los forja como personas de gran carácter y rigurosos en sus disciplinas académicas y profesionales, allanándoles el camino del éxito y mucho más si han tenido la valentía moral de asumir públicamente su condición sexual diversa, porque quienes siguen ocultos manejando una doble vida, una doble moral, no ofrecen ninguna confianza en su conducta, sus actuaciones son fundamentalistas en torno a que no se les reproche su condición y tienden a transgredir la causa de su diversidad.